Accidente de carguero mata a dos en Hong Kong

Dos agentes de seguridad aeroportuaria murieron cuando un avión de carga Boeing 747 se salió de la pista norte del Aeropuerto Internacional de Hong Kong, chocó contra su vehículo de patrulla y lo empujó al mar, informaron las autoridades. La aeronave, operada por ACT Airlines para Emirates y procedente de Dubái sin carga a bordo, realizó un aterrizaje anormal y terminó parcialmente sumergida cerca del malecón del aeropuerto, con daños severos en el fuselaje, cuyo morro y cola se separaron. Los cuatro tripulantes evacuaron a tiempo y resultaron ilesos. La Autoridad Aeroportuaria de Hong Kong indicó que los dos agentes —de unos 30 y 41 años— fueron rescatados del agua inconscientes; uno murió en el lugar y el otro en el hospital. Equipos de emergencia llegaron en minutos y buzos recuperaron el vehículo patrullero a poca distancia de la costa. Imágenes del lugar mostraban el avión con el tobogán de emergencia desplegado y parte del fuselaje en aguas poco profundas. La Autoridad de Investigación de Accidentes Aéreos de Hong Kong abrió una investigación y equipos de varios organismos examinan las condiciones meteorológicas y de la pista, el desempeño del avión, los registros de mantenimiento y las acciones de la tripulación. Funcionarios señalaron que el control de tráfico aéreo había autorizado el aterrizaje y no se recibió ninguna llamada de auxilio antes del incidente. Los investigadores buscan recuperar las cajas negras para determinar la secuencia de los hechos. El aeropuerto mantuvo la mayoría de sus operaciones: la pista norte fue cerrada para inspección, mientras las pistas sur y central permanecieron activas y los vuelos de pasajeros continuaron con mínima afectación. Directivos de la Autoridad Aeroportuaria calificaron el accidente como una tragedia y ofrecieron apoyo total a las familias de las víctimas, destacando que ambos empleados tenían años de servicio. Emirates confirmó que la aeronave sufrió daños durante el aterrizaje y que los tripulantes resultaron ilesos, mientras ACT Airlines y Boeing no emitieron declaraciones inmediatas. Los investigadores señalaron que el carguero, un 747 convertido, sufrió graves daños estructurales al partirse en secciones y quedar encallado en el agua. Las autoridades afirmaron que se analizarán todas las hipótesis —fallo técnico, error humano o condiciones de pista— para determinar las causas del siniestro. El suceso es uno de los más graves en décadas en el aeropuerto y ha renovado el debate sobre los protocolos de seguridad y respuesta de emergencia en uno de los principales centros de carga aérea del mundo.