Avión militar turco se estrella en Georgia

https://www.youtube.com/watch?v=gVltKgYTWwM Un avión de transporte militar C-130 de Turquía con 20 personas a bordo se estrelló en el este de Georgia, cerca de la frontera con Azerbaiyán, poco después de despegar desde la ciudad azerbaiyana de Ganja, informaron las autoridades turcas. Testigos y grabaciones mostraron a la aeronave descendiendo en espiral antes de impactar y estallar en llamas; los restos quedaron esparcidos en un terreno cubierto de hierba, donde se observaban fragmentos ardiendo. Equipos de rescate turcos y georgianos llegaron al lugar y comenzaron las operaciones de búsqueda y recuperación, mientras ministros y altos cargos de ambos países se desplazaron a la zona. El presidente turco interrumpió un discurso para expresar condolencias por los militares fallecidos y calificó el siniestro como una tragedia nacional. El presidente de Azerbaiyán y otros líderes regionales también transmitieron su pesar. El Ministerio de Defensa de Turquía confirmó que entre los 20 ocupantes se encontraban miembros de la tripulación, sin detallar más información sobre nacionalidades. Las autoridades georgianas abrieron una investigación penal por transporte aéreo y pérdida de vidas, mientras expertos de los países implicados iniciaron el análisis de datos y del lugar del accidente. La aeronave, un Lockheed Martin C-130 Hercules, es un cuatrimotor turbohélice empleado en todo el mundo para transporte de carga, tropas y equipos, y puede operar desde pistas no preparadas. Lockheed Martin ofreció condolencias y asistencia técnica a los investigadores. Analistas destacaron la larga trayectoria del modelo y señalaron posibles fallos mecánicos o estructurales como hipótesis iniciales, aunque aún no se ha determinado la causa oficial. Los equipos de emergencia describieron un fuerte impacto y un incendio posterior que dañó severamente el fuselaje y complicó las tareas de identificación y rescate debido a la amplia dispersión de los restos. Equipos georgianos, turcos y azerbaiyanos trabajaron de forma conjunta en el terreno, coordinando las operaciones y los contactos diplomáticos para gestionar la respuesta. La OTAN y otros actores internacionales expresaron su solidaridad con Turquía. Las autoridades advirtieron que la investigación tomará tiempo, ya que los expertos revisarán los datos de vuelo y radar, los registros de mantenimiento y los testimonios de testigos. Mientras tanto, el accidente ha generado luto nacional y renovado escrutinio sobre los protocolos de seguridad aérea militar en la región.